El color blanco es sinónimo de pureza debido a que es el más puro de todos y se asocia muchas veces, a lo que es inocente o limpio. Este color también aporta paz y confort ayudando a aclarar las emociones y pensamientos logrando un equilibrio tanto físico como espiritual. Si deseas que el blanco reine en tu boda y todo luzca puro e impecable, lee y descubre cómo emplearlo para lograr una bella mesa de dulces.
¡CADA DETALLE CUENTA!
Todo en tu mesa de dulces debe ser inmaculadamente blanco, así que debes prestar especial atención a cada elemento. Puedes valerte de dulces que ya vienen en este color como caramelos o almendras acarameladas y para los demás postres, realizarle una decoración en la que el blanco sea el protagonista. En cuanto a las bandejas exhibidoras puedes utilizarlas blancas o añadir elementos plateados.
Para que tus dulces luzcan más hermosos puedes valerte de la brillantina tornasol o de azúcar pulverizada para rociarlos con ella, de esta manera adquirirían una presencia más pura y elegante. Para la decoración de tus galletas incluye detalles en encaje, en cuanto a los cupcakes puedes introducirlos en hermosos capacillos de cartón blanco y añadirle un lindo topper de la figura de tu preferencia. Haz lo mismo con cada dulce y deja que vuele tu imaginación.
EL HERMOSO BLANCO EN TU PASTEL
El pastel es el protagonista de la mesa de dulces por tanto debe resaltar siempre y como se trata de una mesa completamente blanca, entonces tu pastel debe destacar aún más. Para lograrlo incluye elementos decorativos que lo hagan más atractivo como flores, cintas o un topper personalizado pero que resulte completamente blanco.
DECORACIÓN DE LA MESA
Una vez listos tus dulces es momento de armar la mesa y para ello debes utilizar elementos que la hagan lucir hermosa. Utiliza un mantel blanco y realizar un fondo decorativo con tela, flores, o globos. Otra técnica que lucirá hermosa es combinar diferentes texturas en la mesa y el fondo para marcar un contraste atractivo.